TASA AL SALUDO
Caja
Quienes votaron su sanción, quizá crean que la ley que acaba de aprobar la legislatura bonaerense evitará una deflación ruinosa, de cuyos primeros atisbos alarmantes estarían dando cuenta ciertas mediciones. A quienes la critican les parece, en cambio, un absurdo modo de desalentar a aquellos empresarios que benefician al consumidor bajando el precio de lo que venden. Como quiera que sea y guste o no guste, las mercaderías que se ofrecen en los comercios con un descuento superior al cinco por ciento respecto de su precio de lista, serán gravadas por un impuesto. Pero no nos rompamos la cabeza lucubrando. Quizá la razón que ha impulsado esta extravagante norma sea menos intrincada de lo que suponemos, y se inscriba en la desesperada necesidad del Estado argentino de "hacer caja". De modo que cuando imponga tasas al saludo, también sabrá pretextarlas.
LNP
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