ECUADOR: EL HIJO DE AZAFATO

CONFUSA SITUACIÓN
EN EL ECUADOR

Sctores militares se habrían sublevado
contra el "Socialismo del Siglo XXI"
que expresa el presidente Correa,
quien se identifica con el vene-
zolano Hugo Chávez.

En medio de contradictorias informaciones, en la "chavista" República del Ecuador se registra en el momento de rdactar este despacho, un principio de rebelión militar que podría convertirse en golpe de estado con ribetes que admiten toda clase de especulaciones. Algunos observadores relacionan esta situación con el reciente golpe propinado en Colombia a las FARC, donde las capturadas computadoras del "Mono Jojoy" habrían revelado informaciones comprometedoras para distintos vecinos, especialmente Venezuela y El Ecuador, sin descartar alusiones directas a operaciones narcoterroristas con la Argentina.

Esto último demandará un tiempo en aclararse, lo que obviamente sucederá una vez que se supere el problema ecuatoriano, donde los voceros oficialistas aluden a la "defensa de la democracia" y a a intereses no identificados que buscarían tomar el poder, pero eluden cualquier definición que relacione al "Socialismo del Siglo XXI" con el drama de la droga.

Después de hablar a grupos de simpatizantes desde un balcón, Correa desapareció de la escena después de declarar que "si me quieren matar que me maten" y según versiones estaría internado para realizarse una operación bucal, aunque en los hechos el todavía presidente socialista no se encontraría en ningún hospital o clínica. En Quito reina un total desorden, la policía desapareció de las calles, el aeropuerto está controlado por la Fuerza Aérea, se habla de regimientos del Ejército en manos de los rebeldes, sectores de la policía de tránsito habrían anticipado su apoyo al Gobierno lo que carece de capacidad militar y como es inevitable, suena a ridículo. Las declaracions se suceden entrecruzadas pero la tendencia apuntaría a que finalmente renunciaría dentro de un proceso que modificará substancialmente el escenario estratégico continental y arrinconará más aún al lucrativo negocio de los estupefacientes.

Al cierre de este primer informe, pese a los rumores de su internación por razones de salud, Correa estaría reunido con jefes militares y se negría a satisfacer sus reclamos. El propio jefe de gabinete que estaba fuera del país, al regresar no pudo aterrizar en Quito y su avión fue derivado al aeropuerto de Guayaquil. Curiosamente y pese a la confusa situación, el gobierno Kirchnerista se apresuró a respaldar a Correa mediante declaraciones del minstro de Relaciones Exteriores y Culto, Héctor Timerman, en tanto se aguardan otras de Hebe Pastor de Bonafini de quien ahora tomó distancia Estela Carlotto.