DOBLAN LAS CAMPANAS

¿Por quien doblan las campanas?

Las cifras de ciudadanos que pierden la vida en Argentina por razones ajenas a las naturales, son aterradoras, tanto el delito cada vez mas agresivo que parece matar por placer, como la desatinada forma de conducir provocan demasiadas veces el tañer plañidero de las campanas.

La mejor forma de comprobar que un sistema no funciona adecuadamente es: evaluar los resultados.. . y estos en Argentina no sonríen a quienes son los encargados de la seguridad.

Una justicia que parece cuidar al victimario, descuidando a las víctimas y autoridades que se prodigan en controles insuficientes e ineficientes para contener el caos vehicular, hacen que se deba lamentar tantas muertes.

¿Nadie ha reparado que existen causas comunes en ambos casos?. Los delincuentes parecen no razonar y abundan quienes manejan como alienados.

Este último fin de semana los accidentes de tránsito han cobrado la vida de 21 personas y si las autoridades se animaran a practicar las autopsias correspondientes para verificar la presencia o no de drogas en los conductores, seguramente los datos dejarían al descubierto que en muchos casos se estaría en presencia de ese terrible flagelo que se llama drogadicción.

Los controles policiales y municipales parecen no ser suficientes o por lo menos son inadecuados para contener tanta locura.

La multas fotográficas y la presencia policial (generalmente se encuentra en los mismos lugares) no logran frenar la delincuencia ni evitar que cien metros mas adelante un conductor enajenado convierta su automóvil en una máquina de muerte.

Las renovaciones de licencia en Provincia solo garantizan ingresos a los organismos del Estado aplicando impuestos municipales y provinciales que como siempre, tienen incierto destino.

Los exámenes parta renovar u otorgar licencias para conducir solo sirven para crear una forma más de burocracia, ya que no se miden realmente aptitudes, dejando la idea que el único objetivo es incrementar los "ingresos" a las arcas pues se aplicaría el principio que reza: "recauda bien... sin mirar a quien". Hace falta dinero para ganar elecciones y poco escrúpulo para conseguirlo.

Se le exige a los mayores de 70 años, según se ha comentado, renovación anual con la excusa de una probable pérdida de "habilidad" para conducir, pero no se investiga si el postulante de cualquier edad consume drogas... ¿Cuantos ancianos se ven involucrados en accidentes luctuosos y cual es la cantidad de gente drogada que protagoniza accidentes, muchas veces mortales?

Salvar vidas parece no ser prioritario.
La adicción las drogas es una elección de vida y como tal es voluntaria y personal, por lo tanto debiera conllevar un "costo civil" pues la sociedad no merece ser víctima de las consecuencias que emanan de ese dudoso "placer".

Desde el gobierno se insiste en despenalizar la "tenencia" no sería de extrañar que aparecieran carteles en las rutas para complementar esta medida "cuide que la dosis de droga que lleva a bordo de su automóvil, no exceda en cantidad los límites permitidos, queda feo" "No se drogue mientras maneja, puede hacerlo cómodamente en la banquina"...

¿Porque le es permitido manejar un vehículo a alguien que no se encuentra en pleno dominio de sus facultades y reflejos?
Todo delito o accidente de tránsito bajo efecto de la droga o el alcohol debiera ser considerado un agravante y jamás un atenuante y por lo tanto pasible de todo el rigor de la Ley.

No siendo "día de difuntos" alguien podría preguntar: ¿Por quien doblan las campana?... Las campanas doblan por ti ciudadano, tu vida carece de valor en las ruta, aunque en tu casa tampoco estás a salvo, los que debieran cuidarte no saben, no quieren, no les interesa o no pueden.

Horacio Guido Dupuy
Dime el precio de la droga en tu país y te diré el grado de corrupción de los funcionarios que lo gobiernan.


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