LEY DE MEDIOS Y CONFLICTO SOCIAL

Nueva Mayoría - 03-Oct-09 - Análisis

por Rosendo Fraga

El oficialismo enfrenta en el Senado más resistencia al proyecto de ley de medios que la prevista hace un par de semanas. La decisión de mandarlo cuando Cobos estuviera a cargo de la Presidencia, evitando así que lo enviara a cinco comisiones y mandándolo en cambio a sólo dos, fracasó. El kirchnerista José Pampuro, a cargo del Senado por ser su Presidente Provisional, tuvo que enviarlo a cuatro, cediendo a la presión coincidente de la oposición y senadores de su propio bloque. El temor a no tener mayoría en la Comisión de Industria y Comercio llevó al oficialismo a reemplazar a dos senadores propios (Urquía y Vigo), que no estarán presentes, aunque en realidad no quieren votar con el proyecto oficial. Va ganando consenso la idea de introducir modificaciones en dos o tres artículos claves, con lo cual el proyecto volvería a Diputados, planteando el riesgo de que se demore hasta el 10 de diciembre. A ello se agrega que seis senadores del bloque kirchnerista ya anticiparon que no votarán el proyecto como está: Jenefes (Jujuy), Corregido (Chaco), Quintela (La Rioja), Saadi (Catamarca), Giusti (Chubut) y Troadello (Mendoza). También plantea introducir modificaciones el senador socialista por Santa Fe (Giustiniani), cuyos diputados -al igual que los de Chubut- en diputados votaron a favor del proyecto. La sanción prevista para el 7 de octubre podría postergarse ahora hasta el 14. Queda planteada así la posibilidad de una derrota oficialista en la cámara alta, como sucedió el año pasado con la Resolución 125, aunque la forma puede ser la modificación de artículos claves del proyecto y no su rechazo. El kirchnerismo redoblará la presión económica sobre los gobernadores, buscando volcar la posición de varios senadores indecisos.

Las elecciones en Santa Fe y Salta, así como las que se realizan en Corrientes el domingo, confirman el retroceso electoral del oficialismo nacional. El Partido Socialista de Hermes Binner ganó las municipales realizadas en Santa Fe, imponiéndose sobre el PJ que lidera Carlos Reutemann. Ello implica que entre dos fuerzas opositoras, en el ámbito nacional han reunido más del 80% de los votos. En cuanto al ex gobernador, al no haber sido candidato, la derrota justicialista no implica que su posibilidad presidencial haya sido afectada. Quien sí recupera peso en la política nacional es Binner, aunque haya dicho que no piensa en candidaturas para el 2011. En Salta, el justicialismo del gobernador Urtubey, quien critica ahora a Kirchner, ganó ampliamente las elecciones provinciales, quedando el ex gobernador Romero, un peronista disidente, en segundo lugar. Entre ambas fuerzas no kirchneristas en Salta han reunido también más del 80% de los votos. En la segunda vuelta de la elección para gobernador que se realiza en Corrientes el próximo domingo, la disputa está entre Ricardo Colombí, candidato de la UCR, y su primo y gobernador Arturo Colombí, que se alinea con Cobos. El kirchnerismo, relegado al tercer lugar, quedó fuera de la disputa, con lo cual el 100% de los votos estarán entre dos candidatos opositores en el ámbito nacional.

Los conflictos sociales se agravan, incrementándose la posibilidad de violencia en las protestas. La fuerte tensión política que imprime Kirchner a los diversos conflictos, así como la mayor disputa por los recursos públicos (que se han reducido), más un gobierno nacional objetivamente más débil tras la derrota electoral, influyen en este clima. Por un lado, veinte "movimientos sociales" realizaron cortes en casi todo el país, reclamando por el manejo arbitrario del plan de empleo, que crea 100.000 puestos de trabajo con un financiamiento de 1.500 millones de pesos, los que están siendo manejados sólo por los aliados del Gobierno (Bonafini, D'Elía y otros). Paralelamente, las comisiones de base en varios sindicatos, dominadas por la izquierda (PO, CCC y otras), están realizando paros como los de Kraft y subtes, que están fuera del control de la dirigencia sindical peronista. Como la opinión pública está en contra de los cortes, ello llevó a que Macri criticara al jefe de Gabinete por la inacción de la Policía Federal frente a los cortes en Capital y que a su vez el Aníbal Fernández criticara a Scioli por su demora en enfrentar el conflicto de Kraft. Pero la tensión también está aumentando en el campo. El incremento impositivo en la provincia de Buenos Aires puso en marcha una protesta importante que comenzó por los puertos, donde convergieron empresarios, sindicalistas y ruralistas, lo que llevó a gobernador Scioli a plantear una tregua. A su vez, al ser reelecto Eduardo Buzzi como secretario general de la FAA, convocó a la resistencia contra la política del Gobierno.

Kirchner enfrenta un cuadro cada vez más difícil tanto en lo político como en lo sectorial, pero sigue teniendo a su favor alinear una minoría decidida. Mientras el ala izquierda de sus partidarios sigue anunciando su reelección para 2011 -lo que debilita más a Cristina, dado que ella tiene la posibilidad de un segundo mandato-, retoma su presencia en el conurbano con un acto en Lanús. Para impedir que Reutemann pueda ganarle la interna, intenta avanzar con una reforma política que establezca primarias abiertas y simultáneas, pero indirectas. La división del voto peronista y el de la oposición no peronista es la clave en la estrategia oficialista para la próxima elección. El conflicto con los medios se endurece y ello hace que los temas de corrupción tengan más espacio público y que la justicia pague costo político si ahora juega para el oficialismo. El sector empresario cierra filas contra la ley de medios, como lo ha puesto en evidencia la última solicitada de la Asociación Empresaria Argentina (AEA). La Iglesia ha vuelto a criticar al Gobierno por la manipulación de las cifras para ocultar la pobreza y cuestiona el apoyo que desde el oficialismo se está dando a la posición abortista que impulsa desde la Corte la Doctora Argibay, al mismo tiempo que la peregrinación a la Virgen de San Nicolás reúne 600.000 personas.