CAIDO DEL NIVEL

El Tribuno - 05-May-10 - Opinión

http://www.eltribuno.info/salta/diario/hoy/opinion/con-la-unasur-kirchner-pasara-de-ceo-a-gerente

Análisis internacional
Con la UNASUR, Kirchner pasará de CEO a gerente

por Hugo E. Grimaldi

Bastante difícil será la parada para Néstor Kirchner en esta misión que le han confiado para que le inyecte vitalidad a un organismo que hasta ahora era letra muerta.

Y esta dificultad parece tener más que ver con sus modos de ser personales, más proclives a actuar como CEO y voz de mando de una empresa, sin tener que rendirle cuentas a nadie, antes que como gerente general sujeto a directivas, que con los límites ya le han impuesto desde el arranque no las personas, sino las diferentes características de los países que integran la UNASUR, un bloque altamente heterogéneo.

En su nuevo rol, el ex presidente argentino tendrá que mostrar, contra su costumbre, variados términos medios, aunque la diversidad de caracteres de los diferentes actores, precisamente, será de inestimable ayuda para que sepa por dónde debe transitar y por dónde no le conviene ir.

Tampoco podrá Kirchner ningunear fácilmente a quienes no le caen especialmente bien, tal como hace en la política doméstica, ya que en el lugar donde está ahora deberá atender por igual las demandas de los Piñera, Mujica, García y Uribe.

Entre los países más grandes, no es lo mismo Lula que Chávez y es probable que un bandeo del argentino hacia orillas bolivarianas haga que Brasil congele de inmediato esta abrupta resucitación de la UNASUR.

Ahora, habrá que ver cómo se siente el aún diputado en este rol tan novedoso para él como político de vasta experiencia, aunque poco proclive a los protocolos y habrá que comprobar también si tiene la cintura necesaria para ejercer la misión que se le exige, algo que por historia personal, nada diplomática en su esencia, seguramente le resultará bien difícil de abordar. A Kirchner le obsesiona mandar, no ser mandado.

Esta misión pondrá a prueba, además, su hasta ahora mínima capacidad de diálogo y en este aspecto, la experiencia indica que el ex presidente no dialoga cuando decide, ni mucho menos cuando equivoca el rumbo y debe rectificarlo. Ahora, ante el mandato recibido deberá adaptarse y también despojarse por un par de años de aquellas que llamó sus convicciones. Todo un desafío.